viernes, 15 de febrero de 2013

Giovanna y los medios

David ha sido uno de los pocos que ha explicado la singularidad histórica del papa Benito XVI (y por qué deberíamos llamarlo así). Que, por ejemplo, los medios rebajen a categoría de anécdota el anulación teológico del concepto del "limbo" dice mucho de la estatura intelectual del periodismo medio. Que, además, casi pasara desapercibida la renuncia del Papa para los cinco periodistas que cubrían un acto de canonización es también un símbolo de la descomposición de los medios de comunicación: se envía a seguir una noticia a alguien que no entiende el idioma.
Giovanna Chirri
Quedaba, eso sí, Giovanna Chirri, una "vieja vaticanista" despreciada por el mainstream del periodismo 2.0 y que sabía latín (tanto como para tildar de "sencillo" el de Benito XVI). No dudó un instante del significado de lo que había oído de boca del Papa y le pidió a su redactor jefe que se fiara. Así, la agencia Ansa fue la única que pudo dar la primicia gracias a una periodista con experiencia, formada en Humanidades y con criterio, artesana, en resumen; todos esos elementos innecesarios para algunos directivos de los medios zombis.

2 comentarios:

  1. Gracias Jorge por este post! La historia de Chirri merecía ser contada por todo lo que tiene de representativa de este momento infame que vivimos en el que el monstruo de devorar significados parece más activo que nunca!!

    ResponderEliminar
  2. Es que es un símbolo perfecto de la descomposición de los medios, David. Gracias a ti por verlo también.

    ResponderEliminar