miércoles, 20 de junio de 2012

Hackear la universidad, más perspectivas



En la ciudad italiana de Bolonia, en la alta edad Media, la burguesía ciudadana tenía necesidades de formación específica en materias que requerían a un maestro. Adultos jóvenes, la mayoría artesanos, se reúnen en los claustros de las iglesias y buscan maestros que los quieran formar en lo que necesitan. No hay título oficial, no hay construcción nacional, no hay un plan específico de materias, sólo la esencia del aprendizaje: motivación y un maestro que ayude en el proceso. ¿Puede ayudarnos el modelo de universidad preindustrial a crear la universidad postindustrial?
***
En esta conversación con diferentes perspectivas (desde la moderamente reformadora a la totalmente rupturista) sobre una posible Inuniversidad Hacker, me gustaría contribuir a la futura religio con ideas prácticas que tengan en cuenta al usuario, el currículo y la financiación.
Sobre el estudiante

  • Los alumnos provendrían de todas las partes del mundo con experiencia laboral y, en general, no se aceptarían menores de 25 años. Tendrían que demostrar su interés en estudiar.
  • En esta deseable universidad el alumno propondría materias y profesores, no habría un plan de estudios específico porque no habría "carreras" (que no dejan de ser lo que alguien cree que otro alguien necesita saber para un mundo que ya no existe), sino "capacidades" (lo que el alumno sabe hacer) y "obras" (los productos que crea con su capacidad).
  • El alumno tendría que ser capaz de crear conocimiento y divulgarlo libremente por lo que su habilidad comunicativa e investigadora sería  fundamental.
  • Los alumnos serían capaces de competir y colaborar entre ellos, al modo de un torneo medieval o una comunidad científica, formando un grupo motivado de aprendientes en pos de conocimiento.
  • El alumno realmente formaría parte de la universidad mediante acciones (o como cooperativista), de forma que ayudar a su progreso le daría beneficios directos.

Sobre la evaluación

  • Los maestros y pares más cualificados evaluarían las obras del alumno.

Sobre el currículo

  • Las materias podrían ser tradicionalmente académicas (Literatura del Siglo de Oro, por ejemplo) o no (Iniciación al Dibujo para Reporteros o Fabricación Casera de Cerveza) y conformar titulaciones clásicas o no, sería el alumno quien eligiera la pertinencia para su propio plan de estudios de acuerdo a sus intereses personales, sin menciones ni itinerarios.
  • Los planes de estudio y la metodología serían adhoc con una estructura modular, líquida, que permitiera adaptarse a  las necesidades e inquietudes.
  • Las materias se organizarían según el horario y ritmo de aprendizaje de cada alumno, teniendo en cuenta las obligatorias reuniones con su pares y maestro (sería una universidad más trashumante que nómada).

Sobre la financiación

  • La Inurvesidad estaría libre de cualquier financiación estatal. Se financiaría con la matrícula de los estudiantes y colaboración de empresas (que nunca podría superar el 30% para asegurarse de no depender de una única institución para la que acabar formando a sus cuadros).

¿Y tú? ¿Qué añadirías?

4 comentarios:

  1. Yo apunto como toca. Creo que es un aporte fundamental de la base común para los grupos de aprendizaje. Vamos organizando las piezas y esto empieza a ser coherente y genial!!

    ResponderEliminar
  2. Maestro ,esto está tomando cuerpo, dentro de poco estaremos en la fase del cara a cara. Nos queda mucho, pero menos. Un abrazo grande.

    ResponderEliminar
  3. Yo me quedo pensando en qué implicaciones tendría eso para la Enseñanza Secundaria, que no debería ser la convencional si los futuros estudiantes no han de serlo tampoco... Me gusta lo que leo, así que espero que en unos años algunas mentes privilegiadas hayan puesto en práctica todo esto y que algún Ministro menos tonto que los de uso frecuente se dé por enterado de que el sistema ha de cambiar, de abajo a arriba, o al revés...

    ResponderEliminar
  4. ¡Hola, Patricia! Qué alegría leerte por aquí. El problema es que dentro de unos años no habrá "secundaria", es decir, no habrá una línea trazada por el estado respecto a la educación de sus ciudadanos. O la habrá, pero no tendrá demasiada importancia. Según lo veo: la primaria quedará para las comunidades reales organizadas (familias, vecinos..) o grupos religiosos; la profesional quedará en manos de las empresas y la universidad volverá a su origen (comunidades de aprendientes que generan conocimiento). NO serán tres partes de un proceso, sino entes con fines diferentes. No es una utopía ni me acaba de convencer, pero es inexorable: echa un ojo a Coursera: https://www.coursera.org/
    Besos a los cuatro.

    ResponderEliminar